Las salas de máquinas son el corazón de las instalaciones térmicas. En este caso os mostramos la fotografía de una sala con un sencillo esquema de principio de funcionamiento: bomba de calor, bomba circuladora, depósito de inercia y vaso de expansión.

En esta sala se produce el frío y el calor necesario para abastecer las demandas del edificio. Se trata de una instalación un tanto antigua, que hace reflexionar a uno acerca de cuánto han evolucionado estos sistemas. A día de hoy creo que a ningún técnico se le ocurriría dar esta solución para climatizar un edificio. Existen multitud de sistemas que requieren menor inversión inicial, con mejor rendimiento energético, menor consumo, incluso a día de hoy se diseñan "cócteles" de instalaciones dónde los excedentes de energía de un espacio, se transportan a otro espacio con defecto de energía, con el consiguiente ahorro energético.

El mundo evoluciona con la misma hoja de ruta debajo del brazo: No nos carguemos el planeta.